1 de septiembre de 2016

Juventus - Real Madrid CF (Copa de Europa 95-96)

Extraemos del baúl de los recuerdos una pequeña crónica sobre uno de los desplazamientos mas míticos del grupo, sin ser una final: el viaje a Turin de la temporada 95-96. Mucho escribió sobre aquel viaje la prensa canallesca y hoy lo recordamos brevemente junto a unas cuantas fotos de aquel dia.

Tras estar presentes en el viejo Olímpico de Amsterdam, Budapest y Zurich, este ultimo de manera exigua, el sorteo de los cuartos de final de la Champions League deparo el enfrentamiento contra la Juventus. Desde el primer momento la gente respondió y se llenó un vuelo chárter junto a 2 autocares que salieron el martes anterior al partido. Pese a algunos problemas previos con las entradas, debido a que la Cope y una agencia de viajes querían meter el cazo en el club, se salio rumbo a la ciudad transalpina.


Tras el 1-0 de la ida y la posibilidad de pasar la eliminatoria y acercarnos a la ansiada 7ª Copa de Europa, la ilusión se desató en el viaje. Cánticos, buen ambiente, desparrame fue la tónica en ambos medios de locomoción hasta llegar a Turin. Desde el aeropuerto varios autobuses recogieron a los viajeros para, en teoría, estar sueltos por la ciudad hasta la hora fijada en la cual los buses llevarían a la gente al estadio, excepto 3 miembros del grupo que eran los encargados de comprar las bengalas y los botes de humo a la empresa italiana TIFO. La primera sorpresa surgió cuando los autobuses tomaron rumbo al estadio lo que la gente advirtió como una encerrona para estar retenidos por la policía hasta la hora del partido. Para el que no lo sepa, por aquel entonces los alrededores del estadio eran un páramo, por lo que la idea de estar alli no sedució a la gente. Tras descender de los buses la gente intento largarse para ir a la ciudad cosa que a la policía no le gusto, e intento evitar con maneras poco amigables aunque no pudieron evitar que algunos miembros del grupo si pudieran escaquearse para ver la ciudad. 



Horas mas tarde llegaban a la ciudad los 2 buses, que se juntaron con los encargados de comprar el material y con los miembros del grupo que habían escapado de la encerrona de la policía para tomar rumbo al estadio. Una vez en el mismo, otra genialidad, puesto que la ubicación nuestra era en el anillo intermedio debajo de una grada de seguidores juventinos, por lo cual caían objetos y esto no sentó muy bien a la gente que había estado retenido durante varios horas en el estadio. A la salida de los equipos un muy bien bengaleo por nuestra parte para recibir al Madrid mientras que durante el partido conseguimos una buena animación dada la inferioridad numérica con los de casa, un grupo que por otra parte dejo bastante de desear. 





En cuanto las provocaciones locales hubo de todo, desde el habitual lanzamiento de objetos hasta el típico con la bandera regional del País Vasco gritando tonterías sobre ETA. En la segunda parte hubo un intercambio de impresiones con la policía local que se acrecentó tras el segundo gol juventino que nos dejaba eliminados, finalmente los ánimos se calmaron y se confirmo la derrota en el césped. 






Tras el partido y una vez montados en los buses para volver al aeropuerto, hicieron su aparición varios de los jefes de los Viking por la zona. Varios miembros del grupo bajaron a saludarles, algo que no les agrado ni a ellos ni a la policía, por lo cual esta tomo parte en el asunto e incluso opto por entrar a uno de los buses por ambas puertas para igualmente saludar a los integrantes del bus. Finalmente se llego al aeropuerto y se tomo rumbo a Madrid donde la satisfacción general fue la de haber sido un muy buen viaje que no tuvo idéntico resultado en el césped

A los pocos días nos llego una carta al apartado postal desde Italia y donde se reflejó la repercusión que tuvo el desplazamiento por el Piamonte. La carta apareció en el fanzine nº 98 RMCF - Deportivo de la Coruña (05/05/96)